lunes, 4 de diciembre de 2017

Los Cabos: Noticias desde el Paraíso

Los sueños son parte esencial de nuestra especie. Y dentro de los soñadores, en definitiva, creo que ocupo uno de los sitios más altos en el ranking mundial.
Uno de los anhelos más recurrentes en la mayoría de mis semejantes es sin duda, la ilusión de algún día “sacarte la lotería”. En mi caso, como supongo en el de muchos otros, cada vez que iba al estanquillo a comprar un boleto me parecía la inversión más redituable del mundo, ya que en realidad compraba toda una semana de sueños guajiros. ¡Realmente una ganga!
Al día de hoy, sin haber sido jamás un “afortunado” ganador de dicho premio, soy ya un experto ficticio en inversiones: En mi imaginación he adquirido propiedades por todo el orbe, firmado fideicomisos para asegurar la riqueza de mi descendencia y cambiado de coche cada vez que hojeo una revista. ¡Todo un exitoso hombre de negocios!
Entre tantos sueños, siempre existió una pregunta recurrente: Si me sacara la lotería y pudiera elegir cualquier sitio del mundo en el cual quisiera vivir, ¿A dónde me iría? La respuesta durante muchos años fue contundente: San Diego, California.
"La vida me ha dado la oportunidad de conocer países en cuatro continentes. Algunos como visitante y otros como residente. Por lo cual consideraba tener el conocimiento suficiente para que mi decisión fuera clara y objetiva. San Diego es una ciudad en primer mundo, hermosa, no muy grande, con clima envidiable y una cercanía con México, que para mí, es un punto importante a considerar. Por tanto, mis planes eran claros al respecto y mi decisión (también ficticia) ya estaba tomada… Hasta que conocí Los Cabos".
Fue en la búsqueda del lugar idóneo para mi desarrollo y el de mi familia que vine a trabajar con un amigo y ese rincón del mundo resultó ser el maravilloso paraíso de Los Cabos, Baja California Sur. El amor fue a primera vista. Esta magnífica tierra me ha dado los elementos necesarios para tener un crecimiento en muchos ámbitos y vivir pleno. Razones que han hecho se esfume el deseo de eventualmente emigrar hacia San Diego.
Los Cabos es un paraíso único con singularidades sorprendentes, de una belleza sólo imaginable en el arte cinematográfico. Su geografía escarpada, su flora desértica… Y cómo todos estos elementos confluyen en el mar, hacen de este sitio y esta región de México, un lugar mágico.
A esto debo agregar el enorme crecimiento, prosperidad y embellecimiento que este destino turístico sigue teniendo en hotelería, servicios y, sobre todo, en los bienes raíces.
¡He aquí el Premio mayor! Una propiedad, como un cachito de lotería. O, si se puede, toda la serie: Un pedacito de los Cabos, ya sea para vivir, vacacionar o como inversión.
El mercado inmobiliario de los Cabos vive un franco crecimiento y auge, ofreciendo a manos llenas un sinfín de posibilidades, desde propiedades básicas, para vivir cómoda y dignamente, hasta enormes mansiones, rodeadas de hermosos y enormes jardines. Pero todas en este maravilloso paraíso.
El negocio de los bienes raíces tiene, como todo en la vida y en nuestros sueños, sus ciclos, y en una simple analogía con el hermoso mar que nos rodea, estamos en este momento comenzando una ola que cualquier surfista quisiera tomar, porque promete ser larga, tranquila y de muy buen tamaño.
Así que te invito a explorar la posibilidad de soñar en este maravilloso destino, de invertir en el lugar ideal. Sin temor a equivocarme te hará feliz, además, hará que tus números crezcan considerablemente.
La frecuencia de mis visitas a los estanquillos con el paso de los años ha disminuido. Asimismo, mi necesidad de soñar con el tan sobrevalorado premio mayor. Hoy vivo en mi sitio predilecto del mundo con el amor de mi vida y mis hijos. El resto, es disfrutar del paraíso y compartirte mis historias.